Siempre es un riesgo Madrid. Un alto riesgo. Competir con la gran oferta permanente de la ciudad, viniendo desde el sur, sin un cabeza de cartel mediático, por muy seguros que estemos del espectáculo a presentar... Riesgo y atrevimiento.

Pero aquí estamos, hemos estrenado con una calurosa acogida y con una media de público muy alta y en ascenso. Parece que el boca a boca va expandiendo la ola de los buenos comentarios y críticas y nosotros estamos contentos, agradecidos por la respuesta del público y los aplausos. El frío de los días fríos se atenúa y el cielo de Madrid nos acoge con un sol que pica y que preludia ya la primavera. Las cartelas en las farolas, los carteles digitales y las proyecciones en Callao, nos recuerdan constantemente que estamos vivítos y coleando.

De momento, no se le puede pedir más a la capital del reino.

SUPERADAS TODAS LAS EXPECTATIVAS

Ya hemos regresado. Como si fuera un paréntesis en el tiempo hemos estado en Madrid como en una realidad distinta. La disciplina de función diaria ha pulido el espectáculo dando matices a todas las escenas que, refrescadas día a día, han puesto de pie al personal madrileño y nos han deparado críticas encendidas y cariñosas. La media de público ha superado con creces lo esperado y nos deja una puerta abierta al futuro con otros espectáculos de la Cía.  Amigos y familiares de la ciudad del reino fueron a vernos y volvieron con más amigos. El público en general valoró el trabajo actoral intenso todos los días y el espectáculo causó sorpresa en una zona de Madrid por la que parece que la crisis endémica de este país en crisis es cosa de bobos o de otros. Gustazo en fin para el recuerdo de una gratísima experiencia. 

Gracias, a los responsables del teatro Fernán-Gómez y gracias a la apuesta atrevida de la Producción del Clásico sevillano.